Vivir en un departamento u hogar alquilado implica que habrá seguramente muchas modificaciones que se desearían hacer que no van a estar permitidas por el dueño de la propiedad. O que también nosotros no estemos dispuestos a realizar, ya que no queremos justificar un gasto importante en una propiedad que es ajena y en un futuro debamos dejar.

De todas maneras, hay ciertas renovaciones que se pueden realizar de forma temporal, para sentir los ambientes más personalizados y en concordancia con el gusto personal. Modificaciones que, con cierta creatividad, tienen la capacidad de convertir los espacios como si fueran propios. Y son aquellos cambios que no presentarán mayores dificultades para quitarlos cuando llegue la hora de abandonar el hogar.

Cambios en los pisos

Una de las maneras más sencillas de transformar una habitación es con el uso de alfombras. Debido a la enorme cantidad de diseños y materiales que existen en el mercado aportan personalidad al ambiente, además de delimitar las distintas zonas y de cubrir aquellos pisos que no son de nuestro agrado.

Se puede colocar una alfombra en el living, abarcando parcial o totalmente el sector de los sillones y mesa de centro, o en el comedor, sumando una alfombra de grandes dimensiones para que pueda contener la mesa y las sillas. También en el dormitorio como bajada o pie de cama y el listado podría seguir.

Para zonas más pequeñas, como puede ser un hall o un baño, existe otro recurso que es el colocar vinilos. Estos se adhieren fácilmente al piso anterior, renovando rápidamente el espacio. Lisos o con diseño, y en variedad de tamaños, son sumamente decorativos por lo que, sin dudas, generarán un cambio rotundo en el lugar donde se los coloque. 

Los vinilos pueden utilizarse también en la cocina, tanto en el piso como para mejorar el aspecto del revestimiento en sus paredes.

Aprovechar las paredes

La pintura es un recurso que genera un cambio inmediato en los ambientes. Por lo que, si en el contrato no figura la prohibición de pintar las paredes, esto sería una gran solución para darle al espacio un nuevo aspecto con tus colores favoritos.

De no estar permitido pintar, existen empapelados y vinilos de fácil colocación, e igual sencillez al tener que retirarlos. Y aunque se coloquen en solo una pared, con seguridad generarán un gran impacto en el ambiente. 

También es fundamental aprovechar los agujeros ya existentes para colgar cuadros, láminas o fotografías más personales.

Apostar por una nueva iluminación

Otra manera fácil de personalizar un espacio es a través de las lámparas. Aunque ya haya una instalada, las lámparas son fáciles de reemplazar, por lo que se puede descolgar y guardarla dentro de algún ropero. Y en su lugar elegir una lámpara de distinto estilo que provoque un cambio estético en el ambiente.

Una lámpara puede convertirse en el centro focal de un espacio si nos inclinamos a elegir una de grandes dimensiones o de estructura llamativa.

Personalizar con muebles auxiliares

Las propiedades en alquiler suelen contar con el mínimo de muebles por lo que una buena idea para no sentir que nuestro hogar se encuentra desangelado es sumar pequeñas piezas auxiliares que completen el espacio. No es necesario incurrir en grandes gastos, se trata de sumar elementos con los que te sientas a gusto. 

Además, tienen el beneficio de que estos muebles auxiliares podrán ser reutilizados en un futuro hogar, ya que, en su mayoría, se consideran muebles comodín, es decir, que se adaptan a múltiples espacios y caben en cualquier hogar.

En los muebles ya existentes se pueden desatornillar los tiradores y reemplazarlos por unos más modernos o que se adapten mejor a tu gusto personal. Solo se deben guardar los anteriores con cuidado para poder volver a colocarlos cuando llegue la hora de la mudanza.

Modificar la distribucion

Un consejo para que los ambientes ya amueblados sean más cómodos y funcionales para tu estilo de vida es cambiar los muebles de lugar. 

Y no se trata solo de rotar dentro del mismo ambiente, si no de animarse a encontrar el lugar donde ese mueble funcione mejor para tu rutina, aunque sea desplazarlo al otro lado de la vivienda. 

Sumar con textiles

Cuando el departamento u hogar alquilado solo tiene los muebles principales, una manera de generar nuestro toque personal en ellos es a través de los textiles. Mediante sus colores, texturas y estampados se podrá sentir como que el espacio nos pertenece.

Agregando en el living almohadones, o modificando sillones y almohadones ya existentes con fundas nuevas, y también eligiendo una ropa de cama en la habitación es donde podremos ver nuestra personalidad reflejada. 

Decorar con naturaleza

Las plantas y las flores naturales aportan frescura, color y vida a los ambientes, ayudando a modificar la sensación negativa que pueda provocarnos un espacio. Hay grandes alternativas en plantas de interior, así como también en los modelos de macetas. 

Una planta alta en un rincón, o una composición de plantas de diferentes alturas, resultarán, con sus formas y colores, en un buen contraste con el resto de la decoración.