Se va acercando la época del año en la que empezamos a soñar con el momento de estar acurrucados en un sillón, cubiertos por una manta, mientras disfrutamos de un buen fuego que desprende calor y que invade todo el lugar.
La presencia de una chimenea en casa, además de calentar los espacios, resulta un elemento de decoración que adquiere un gran protagonismo en el diseño. Es la que va a dictaminar cómo se va a resolver la ubicación del mobiliario y demás complementos dentro del ambiente y va a modificar también la percepción que tengamos del lugar, al hacerlo más acogedor y romántico.
Según nuestro estilo y necesidades existen diferentes diseños y tipos de chimenea que se deben tener en consideración.

Chimeneas de leña tradicional

Las chimeneas tradicionales de leña son las que todos conocemos, las que normalmente armamos en nuestra cabeza cuando nos imaginamos a una chimenea. Cuando afuera hay temperaturas bajas no hay nada más placentero que escuchar el crujido y crepitar de un fuego.

La chimenea tradicional abierta es aquella que brinda sus servicios desde hace siglos. Generalmente se encuentra realizada en materiales como el ladrillo o la piedra y es la que te permite sentir el calor, escuchar el crujido de la madera y poder oler la madera quemándose.

La desventaja es que, si no se tiene un hogar a leña ya en el espacio, es decir, si no se tuviera que solamente restaurar una chimenea anterior, el trabajo que se precisa para colocar una es realmente arduo. En la tarea de construcción se deberá instalar la abertura de la misma y también la chimenea para que tenga una correcta ventilación.

Estufas de leña

Sin embargo, dentro de las chimeneas a leña hoy en día es posible encontrar distintas alternativas dentro de la categoría, donde la elección de una u otra dependerá de la instalación, del calor que emiten y de su rentabilidad.

Aparecen entonces las estufas de leña, cada vez más utilizadas en los últimos años, que, si bien no son técnicamente una chimenea, son una opción más que tentadora para cumplir la función de quemar leña para calentar nuestro hogar y, al ser más fáciles de instalar y ocupar menos espacio, son el elemento elegido cuando se quiere sumar calor a un espacio ya creado.

Y así como en la chimenea tradicional, las estufas de leña requerirán de una tubería para ventilar el humo que emanan a través de una chimenea hacia el exterior.

Chimeneas a gas

Si bien las chimeneas a gas no generan la misma sensación placentera que las chimeneas a leña tradicionales, este tipo de hogares queman de manera más limpia y, como regla general, brindan mayor calor a un menor costo.

También corren con el beneficio de precisar menos obra para su instalación, por lo que resultan una interesante alternativa a las chimeneas tradicionales.

Chimeneas de etanol

Las chimeneas que queman etanol son tendencia en la actualidad, gracias a su fácil instalación y por su diseño contemporáneo.

El bioetanol es un combustible que se obtiene de la fermentación de materias ricas en azúcares, por lo que en este tipo de chimeneas no es necesario instalar un tiro para deshacerse de las emisiones, al no ser perjudiciales para la salud.

Son un excelente recurso ya que, al igual que las anteriores chimeneas, se obtienen llamas reales, sin precisar ningún tipo de instalación, en lo absoluto, y además posee un alto rendimiento ya que, al no tener tiro, todo el calor que desprende permanece dentro del ambiente.

Chimeneas eléctricas

Las chimeneas eléctricas son elementos decorativos que simulan el efecto del fuego para crear una sensación de calor de hogar en el ambiente.

Si bien entre la amplia oferta existente de chimeneas eléctricas la gran mayoría ofrece la función de irradiar calor, lo cierto es que aquello supone un gasto enorme si se tiene como finalidad calentar todo un ambiente, teniendo en cuenta que el calor se lograría a través de una resistencia eléctrica.

Se pueden personalizar y elegir distintos efectos de fuego que se logran a través de juegos de luces en 3D, y en varios modelos, se incluye leña artificial que simula estar quemándose, también a través de luces.

Y al estar conectada a la red del hogar se puede sumar a la domótica del mismo y manejar sus distintas funciones desde la comodidad de nuestro celular.

Una chimenea para cada estilo

Una vez elegido el tipo de chimenea que más se adapta a nuestras necesidades, y que combina a la perfección con nuestro diseño y con el espacio con el que contamos, es momento de convertirla en el centro de todas las miradas a través de su revestimiento.

Esto dependerá del estilo que respire nuestra casa, es decir, si se trata de ambientes clásicos o más modernos. Para un hogar más contemporáneo una chimenea de mármol pulido, o con tablones de madera o de cemento alisado encajaría perfecto, mientras que, para un hogar más clásico, una chimenea con ladrillo a la vista pintado de blanco, o con molduras o con algún cerámico tradicional funcionará mejor. 

Luego quedará adornarla o no, dependiendo del gusto del dueño de casa, con algunos elementos decorativos que logren destacarla aún más, como una obra de arte, un espejo, una repisa de madera con objetos decorativos, entre otras tantas opciones.