
El sueño de un hogar con pileta

Durante los últimos años se ha producido un éxodo de las grandes ciudades a zonas urbanas más alejadas en búsqueda de hogares con más metros cuadrados, y que tengan un espacio en el que se pueda disfrutar del aire libre.
Ya sea que se utilice como vivienda permanente o solo para uso de fin de semana, el objetivo resulta el mismo, en definitiva, que sea lo más cómoda posible para poder sumar recuerdos imborrables viviendo en ella.
En estos días es muy probable que la casa haya sido preparada para el invierno, posiblemente poniendo a punto la chimenea, y sacando a relucir los textiles que brindan mayor calidez y nos cuidan del frío, como mantas sobre el sillón y alfombras mullidas en el suelo. Pero siendo que el exterior es poco frecuentado durante el invierno, no resulta una mala elección adelantarse y comenzar con los preparativos para pasar un verano inolvidable.
La pileta como aliada
Una de las principales atracciones cuando las temperaturas son altas es poder pasar horas dentro de una pileta por lo que, si el deseo es encarar un proyecto para contar con una de ellas para el verano próximo, es una buena oportunidad para comenzar a planear y no tomar decisiones apresuradas.
Es importante ser meticulosos al evaluar las zonas del jardín que más reciben la incidencia solar para decidir cuál es el mejor sitio para construirla. Lo recomendable es valorar el posible lugar en distintos horarios, para ver cómo se va comportando el sol a lo largo del día.
Existen dos modelos de pileta que son los más solicitados al momento de iniciar la obra, siendo idóneo conocer las características de ambos en cuanto a los materiales, sus ventajas y costos, para tener claridad de cuál es el que mejor se ajusta a nuestras preferencias.
Piletas de obra in situ
Es la elección más cara en cuanto a modelos, ya que precisa de una mano de obra que trabaje en el lugar donde la pileta va a quedar permanentemente. La gran diferencia con la opción que se verá a continuación es que la pileta se construye desde el inicio en su lugar definitivo.
Se debe contratar a personal autorizado, que entienda sobre la materia, para que el armado y espesor de la pileta se haga acertadamente y que, una vez colocado el hormigón, no aparezcan inconvenientes o posibles grietas en la estructura.
Algunas de sus ventajas es que es el modelo más duradero, y donde es posible dejar volar la imaginación en cuanto al diseño y tamaño de la pileta, por tratarse de un producto totalmente personalizado. Ya sean de hormigón armado, o de ladrillo combinado con hormigón, admiten cualquier tipo de terminación, como pintura, cemento alisado, las clásicas venecitas u otro tipo de revestimiento.
Piletas de fibra de vidrio
Este modelo resulta uno de los más utilizados, al venderse la pileta ya prefabricada en fibra de vidrio y poliéster, estando lista para transportar a su lugar final. Existen varios modelos predeterminados entre los que se pueden elegir, para definir el que más se ajusta a los gustos y necesidades personales de cada cliente.
Es una obra más limpia ya que, aunque lógicamente se necesita hacer la excavación para liberar el espacio donde se deberá colocar la pileta y la instalación sanitaria, no requiere el uso de otros materiales y herramientas que ayudan a provocar un caos mayor en el área verde de nuestro hogar.
Otros beneficios son que por encontrarse ya armada es de rápida instalación, y también más económica, por no precisar de mano de obra calificada para realizar el trabajo. Aunque si se estuviera en búsqueda de un modelo de pileta que pretende ser único y original, entonces la opción de la pileta de fibra de vidrio no será la indicada, por tener modelos estandarizados, limitando la posibilidad de modificar su diseño.
Piedra volcánica: la gran estrella en revestimientos
Desde hace algunos años se señala a la piedra volcánica como la favorita al momento de elegir el revestimiento para la pileta. Y esta preferencia es el resultado de que la piedra volcánica, o también conocida como piedra índigo, cumpla con varios requisitos que inclinan la balanza hacia su favor.
Para empezar, es un material sumamente estético, donde cada piedra se presenta con una tonalidad distinta, al tratarse de piezas únicas. De esta manera, se genera un interés visual en el conjunto muy valioso, con la particularidad que al mojarse cambia sutilmente de intensidad y una vez seca, vuelve a su tono natural. Su presentación es en cuadrados de 10 x 10 cms. o de 20 x 20 cms.
Otros beneficios más que seductores para definir su uso es que son completamente antideslizantes y no raspan. Además, son de fácil mantenimiento, al ser altamente resistentes a las bacterias, y ayudan a purificar el agua. Y como si esto fuera poco, cuentan también con otra gran cualidad que es la de tener una baja tasa de absorción del calor. Por todo esto, la piedra volcánica es un material de alta calidad y muy codiciada en la actualidad.